En la sociedad actual cada vez son más las parejas que conviven antes de casarse y retrasan o hasta borran de su mente el matrimonio. Quienes están a favor de este tipo de relaciones arguyen ‘queremos comprobar si nos vamos a llevar bien’, y los que están en contra advierten ‘si les das la leche, […]
Quienes están a favor de este tipo de relaciones arguyen ‘queremos comprobar si nos vamos a llevar bien’, y los que están en contra advierten ‘si les das la leche, nunca van a comprar la vaca’. La sabiduría popular indica que vivir juntos en un ‘matrimonio de prueba’ es una buena manera para determinar si las parejas son compatibles antes de la boda. Pero ¿realmente surte efecto esta idea?, ¿cuáles son los factores que conducen a un buen matrimonio y cómo saber si la otra persona es la correcta? Las respuestas no siempre son las mismas. Pero lo que sí resulta cierto es que decidirse a vivir en pareja requiere la fidelidad del uno al otro para que la relación dure toda la vida.
Pensando en ese futuro ideal y en el éxito de la unión, muchos novios deciden cohabitar antes de casarse para comprobar que han elegido a la persona correcta, otros lo hacen por el miedo a la separación temprana y algunas parejas menos complicadas justifican la decisión por ahorrar dinero. Cualquiera sea la razón, la convivencia en pareja implica retos y, si la relación no está basada en amor, respeto y compromiso, será imposible que sobreviva. La pareja que carece de esos elementos no podrá superar los momentos difíciles ya sea casada o en unión libre. Por ello, antes de tomar una decisión, analiza si la esencia de tu noviazgo es el amor y si ambos están dispuestos a dar el ciento por ciento para que todo funcione en el matrimonio. En esta edición BODAS de Amiga te resumimos los consejos de expertos en el tema y de varias parejas entrevistadas, quienes después de algunos años viviendo juntos decidieron dar el paso de casarse.